NACIMIENTO DEL RÍO MAGDALENA - páramo de las papas

 
Además de haber sido un viaje hermoso, me pareció increíblemente fascinante poder “vivenciar”, luego de muchos años, una de las tantas clases de geografía de bachillerato de la profe Isaura, quien intentaba “sin mayor logro”, lo anterior lo digo no por la calidad de la profesora, sino porque se hace demasiado difícil desde un aula de clase, describir el colorido y la majestuosa belleza de estos maravillosos escenarios. 

El “PÁRAMO DE LAS PAPAS”, (destino de este hermoso viaje) se ubica en el Macizo Colombiano, el cual considero un lugar de prioritario conocimiento para cualquier viajero, ya que es considerada la ESTRELLA FLUVIAL COLOMBIANA. Creo que la única forma de dimensionar la increíble belleza y riqueza hídrica de este lugar, es recorriéndolo, además es un gran ejercicio de apropiación de nuestros recursos naturales, para empezar a asumir sentido de pertenencia y poder valorar lo que por derecho nos pertenece como Colombianos… dice una frase…“Solo se ama lo que se conoce y se defiende lo que realmente se AMA".

Sé que me quedare corta al intentar describir las sensaciones, los colores y emociones de visitar nuestra hermosa ESTRELLA FLUVIAL COLOMBIANA.

El Macizo Colombiano, también llamado Nudo de Almaguer, es la estrella hídrica más importante de Colombia, está constituido por un conjunto montañoso de los Andes Colombianos que cubre a los departamentos de Cauca, Huila y Nariño, al sur se encuentra el Nudo de los Pastos y al norte se desprenden las cordilleras Central y Oriental, “este último fue el destino de este hermoso viaje”. Es identificado como reservorio de aguas, pues allí nacen ríos como el Patía (de la vertiente Pacífica), el Cauca y el Magdalena (de la vertiente Caríbe), y el Putumayo y el Caquetá (de la cuenca Amazónica). Contiene 362 cuerpos lagunares en la Alta Montaña, 13 páramos y ecosistemas ricos en flora y fauna. En dirección suroeste a noroeste sobresalen los páramos de Cutanga, el Letrero, las Papas, el Apio, el Buey, Hermosas y los Volcanes nevados de Sotará, Huila y Puracé; en este último y en su área circundante, 830 km2, se localiza el parque Nacional Natural del Purace.

El Macizo Colombiano ha sido catalogado por parte de la Unesco como reserva de la biósfera, es un área estratégica a nivel nacional e internacional, dado su significado para la producción de agua, la biodiversidad y los ecosistemas. El macizo es considerado una de las regiones que alberga las mayores reservas hídricas del planeta en zonas ecuatoriales. En esta área Colombiana están asentadas comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinas mestizas, convirtiendo a esta ecorregión en referente, no solo por su biodiversidad e importancia hídrica sino por la construcción multiétnica y pluricultural.

La Corona del macizo, territorio ancestral y sagrado, está poblada por comunidades indígenas Yanaconas y campesinas (guardianes de las lagunas y los páramos); en las zonas altas del Núcleo del Macizo, predominan las comunidades indígenas Yanaconas, Papallaqtas, Paeces y Coconucos. Hacia las partes medias de las cuencas de los ríos Patía y Caquetá predominan comunidades campesinas y asentamientos de afrodescendientes, y en menor grado comunidades Ingas, Yanaconas, Kamentzá; en la región del Huila, se encuentran asentamientos de colonos y campesinos mestizos principalmente. (Fuente: Wikipedia).

Son pocos los aventureros que se deciden por visitar el “páramo de las papas”, algunos por miedo al conflicto armado, ya que en una época, el macizo Colombiano albergaba a grupos ilegales y era reconocido por los continuos enfrentamientos, fue un referente de violencia e inseguridad. Otros no lo visitan por considerarlo demasiado agreste, ya que el lugar está atravesada por grandes y cerradas montañas en un ambiente de páramos bastante frío. Solo puedo decir que la región es tranquila y que además esta resguardada por los funcionarios de Parques Nacionales Naturales (PNN), quienes deben realizar recorridos continuos hacia el interior de la montaña para vigilar que no halla extracción de flora y fauna. Estos funcionarios son guardianes que ayudan a preservan la gran reserva hídrica de estos mágicos lugares; cuyos cauces irrigan de vida a media Colombia, aprox. 1500 km antes de llegar al mar.

Día 1: Nuestro objetivo principal al adentrarnos en el Macizo Colombiano, era conocer el nacimiento del Río Magdalena (o MAGOLO como lo llaman los lugareños), para ello iniciamos el viaje realizando desplazamiento desde la ciudad de Medellín, el 4 de abril de 2015 a las 8pm rumbo a la ciudad de Pitalito (Huila) donde llegamos a la 1pm del 5 de abril.

Día 2: Ya en Pitalito, tomamos un colectivo que nos llevó a un pueblo llamado San Agustín, ubicado a 45 min, allí almorzamos en la plaza de mercado, donde pudimos degustar la sazón de la región por una módica suma de $3000 por almuerzo. Luego del almuerzo nos dirigimos al hotel, ubicado en las afueras de San Agustín, un agradable lugar tipo campestre llamado “Francois”. Soltamos maletas y nos dirigimos a toda carrera a conocer el parque San Agustín, fue tal el afán por llegar a tiempo, pues el parque lo cerraban a las 4pm, que se nos olvidó llevar cámara, pero bueno estos recuerdos quedarán guardados en nuestras memorias.

Ya entrada la noche salimos del parque arqueológico San Agustín y nos fuimos para la plaza principal del pueblo a comprar artesanías, mecato y otras cositas faltantes para el viaje y a las 7:30pm nos encontramos con nuestro guía Don Segundo, quien nos hiso un pequeño resumen de cómo serían nuestros próximos 4 días al interior de la montaña, además nos brindó algunas recomendaciones generales para el recorrido. Este día nos acostamos a las 10:30pm.

Día 3: El guía Don Segundo nos recogió en un chivero en el hotel Francois a las 8am, para llevarnos a una vereda llamada Quinchana. El recorrido se realiza por una carretera destapada agreste, con tramos de mucha dificultad, se pasa por cañones súper miedosos que conforman el tramo llamado “Estrecho Magdalena”, por donde baja el río Magdalena y se conforma en este trayecto y con algunos afluente del sector, un pequeño río llamado “Río Magdalena”, se hace difícil dimensionar que aproximadamente 1500 km más aguas abajo, este pequeño riachuelo podría convertirse en el cuerpo de agua más grande e importante de Colombia. 

Llegamos a la vereda Quinchana, luego de 1 hora 30 minutos de recorrido en chivero, a la vivienda del señor Arsenio Guzmán (finca El Filo), donde tomamos un desayuno-almuerzo muy trancado e iniciamos caminata a las 10am. Luego de 1km de recorrido, pasamos por el caserío de la vereda Quinchana, formada por aproximadamente 40 viviendas, donde se encuentra una cabaña de Parques Nacionales Naturales (PNN). 

Luego de pasar un puente en concreto sobre el río Quinchana, se inicia la caminata hacia el interior de la montaña por un hermoso camino de herradura. Este camino fue elaborado por los indígenas de la región muchos años atrás y luego toma el nombre de camino nacional, por comunicar las comunidades de Pasto, Putumayo Caquetá, Quito, Cauca, Magdalena y Pacifico. Hace pocos años el camino fue abandonado por la construcción de carreteras y vías pavimentadas. Nos contaban los guías, que recientemente se había realizado mantenimiento ya que en algunas épocas, el camino se tapa (en rastroja) volviéndose totalmente intransitable.

El recorrido desde la vereda Quinchana comienza con un ascenso de 1h hasta un punto llamado “alto quinchana”, de allí se continua en travesía pasando por la qda La Cascada y la qda Cristales, sigue ascenso hacia “alto canelo” donde pudimos realizar las últimas llamadas, ya que estaríamos sin señal de celular durante los próximos 2 días. Inicia un descenso hacia un puente llamado barandillas donde tomamos un rico baño en el río Magdalena, es un agua de páramo súper fría, donde dejamos congelados todos nuestros pecados jeje.

Sigue un tramo de sube y baja y zigzag, pasando por, peña seca hasta llegar a 5 postes, que era donde antes existía un teléfono veredal, en este punto inicia un tramo de topografía semi-plana donde logramos observar el río Majuas denominado así por ser el nombre de un tubérculo característico de la región. El recorrido continúa en travesía pasando por una casa llamada “posada piedritas”, se inicia descenso hasta una escuela abandonada y luego travesía a la qda San Antonio.

El terreno continua en travesía hasta “posada juntas” punto donde desemboca la qda ovejas sobre el río Magdalena, se pasa el puente llamado “río ovejas” y 40 minutos después llegamos a nuestro sitio destino de este primer día llamado “Hospedaje El Cedro”, ubicado en la vereda San Antonio a un altura de 2200msnm. Llegamos a las 6:30pm, luego de recorrer 19km y 8h 30 minutos de caminata. Llegamos con un hambre que parecían 5, pues a los guías se les olvido empacarnos fiambre y realizamos todo el recorrido sin almorzar, solo con el mecato que cada uno había logrado llevado en el morral de asalto. En el hospedaje nos prepararon una exquisita trucha de río, la cual nos disfrutamos hasta el último huesito y finalmente nos acostamos a las 9:30pm.

Día 4: Salimos de la posada "El Cedro" a las 7:40am en ascenso continuo hasta el “alto de la vaca”, llamado así porque, en este lugar transitaba continuamente una danta que los lugareños confundían con una vaca. Este día de caminata se caracterizó por estar totalmente pasado por agua, lo cual acentuó la dificultad del trayecto, ya que los pantaneros del recorrido eran muy difíciles de esquivar y se tragaban la totalidad de la bota.

Luego del alto de la vaca, el camino continua en travesía hasta peña chiquita, donde se observan algunos espacios debajo de las rocas para resguardarse del frío y de la lluvia en el páramo, se sigue en travesía hasta puente Santa Marta y continua en ascenso hasta el sitio de ingreso al PNN Puracé y pasando el río Cuchiguaico. En este sector se observa como se desprende la cordillera oriental de la cordillera central. Este lugar es un importante sitio de conectividad biológica entre el PN Regional Los Guacharos y el PNN Puracé.

Se continua en ascenso y se llega a un lugar llamado agua arisca o peña grande, donde se observa como cae de la roca un chorro de agua que se mueve de lado a lado con el fuerte viento del lugar, sigue ascenso hasta el chontadural, luego pasamos la qda Santa Marta, la qda Vardas, seguimos en ascenso hasta llegar al lugar donde inicia vegetación de páramos, allí paramos a almorzar a la 1:30pm. 

Luego del almuerzo continuamos en ascenso pasando la qda Lamedulce, es un sitio bastante frío, que obliga a los viajeros a sacar un pedazo de panela o dulce para subir las calorías. Se pasa la qda la Ye, y luego se observa el aviso para el desvió hacia la laguna de Santiago, aquí tomamos el camino de la derecha hasta llegar al sector el diviso donde se inicia un largo plan hasta la entrada a la “Laguna de la Magdalena”. Al encontrarnos con el letrero de la laguna, ingresamos a mano derecha, este no es un camino muy marcado, pero en línea recta se llega a la laguna pasando por colchones de agua en un recorrido de aprox.  15 minutos.
 
 Laguna de la Magdalena

El lugar es llamado “LAGUNA DE LA MAGDALENA”, es el punto donde nace el RÍO MAGDALENA, y fue la motivación principal para realizar este viaje. Es un espejo de agua bellísimo e inmenso ubicado a un altura de 3400msnm, rodeado de una vegetación de páramo con frailejones y rastrojo bajo, observamos también una familia de patos. El viento de estos sitios de alta montaña es muy rápido y en un abrir y cerrar de ojos, se puede cubrir o despejar la laguna de la espesa neblina característica de la zona, contamos con suerte de poder tomar maravillosas fotos de esta bella laguna totalmente despejada.

Continuamos el recorrido por un largo descenso en un camino con mucha piedra, lisa y con arroyos de agua que recorren el camino, se pasa por un sector llamado boquerón donde termina al área del PNN Puracé y se continúa en descenso hasta llegar a una Ye, allí se puede ingresar también a la Laguna de Santiago. El recorrido continúa en descenso por camino de herradura en tierra, hasta llegar al sector “alto Caqueta”, donde se ubica un caserío y se encuentra la cabaña de PNN. El camino continúa recorriendo la vereda La Hoyola, hasta el hospedaje en la finca de los señores Analia y Gulberto (cel: 3146103322). Ese día cenamos un exquisito caldo de pescado al calor de un fogón de leña. 

Día 5: Salimos de la finca llamada “Los Milagros” de Analia y Gulberto a las 8:30am, luego de un delicioso desayuno campesino, hacia el mirador "Laguna de Santiago". Inicialmente atravesando todo el caserío de la vereda la Hoyola, pasando por casas antiguas payaneses, que fueron los antiguos colonizadores de este pequeño poblado, el recorrido se realiza devolviéndonos un corto tramo de lo andado el día anterior hasta llegar a la Ye que comunica a la laguna de Santiago y tomamos esa dirección a mano derecha. La caminata continúa en ascenso pronunciado por un camino de mucha roca suelta y pantano, el bosque del recorrido forma un hermoso túnel verde y su colorido se debe a la cantidad de musgo, al tipo de vegetación y a la humedad del sector, aproximadamente 1h después de la Ye se ingresa a ecosistema de páramo. 

Realizamos la primera parada para descansar, en un hermoso mirador ubicado a 3350msnm, donde se observa el valle donde está ubicado el caserío del corregimiento de Valencia (destino del día 6). Este punto de descanso es llamado “filo el letrero”, porque tiene tallado un petroglifo en una roca, con la figura de una letra “P”, debido a una maldición que tenía este lugar. 

Nos cuenta el guía que este camino que hemos transitado desde el día anterior, tiene una totalidad de 40km y une el departamento del Huila con el departamento del Cauca y ha sido transitado por muchos viajeros durante siglos. Con el paso de los años, este sitio ha cobrado muchas vidas, debido al agreste terreno y al inclemente frío del páramo (años atrás, no existía indumentaria de páramos y eso hacía más vulnerable a las personas, debido a las bajas temperaturas del lugar), la maldición antes mencionada con tantas muertes del lugar, fue anulada por un cura, a través de rezos y dejo como seña una letra “P” en una roca de este mirado.

Del mirador se observa todo el cañón del nacimiento del río Caquetá, el cual fluye inicialmente desde la quebrada González, y forma más aguas abajo “el charco del oso” y el “humedal Caquetá”, fluye por un hermoso valle que configura el asentamiento del caserío del corregimiento de Valencia. El PNN Puracé es un gran corredor del oso de anteojos, cuentan los guías, sus experiencias de avistamientos, de lugares de paso y de las cámaras trampa que tienen ubicadas en todo el PNN, se observan en la caminata marcas de rasguños y comederos del oso.

Se continúa el recorrido hacia el mirador de la Laguna de Santiago, pasando por el mirador Huila donde se ve, muy a lo lejos, la Laguna de la Magdalena (nacimiento del río Magdalena). Inicia vegetación de páramo, la cual se caracteriza por ser arbustiva, de un color verde oscuro, flores muy pequeñas y por tener además gran cantidad de frailejones a cada paso que se da, algunos florecidos de un hermoso color amarillo ocre intenso. El clima también cambia drásticamente caracterizándose por intensos vientos que hacen bajar mucho la temperatura, el cual se siente fuertemente en orejas, manos, cachetes y nariz, quedamos con los labios rajados y los cachetes colorados.

El objetivo de este 5to día era conocer la laguna de Santiago, la cual es increíblemente hermosa!!!,  es un espejo de agua (más grande que la laguna de la Magdalena) formado por una inmensa roca totalmente vertical al fondo y gran cantidad de frailejones a su alrededor, se encuentra como metida en un hueco medio inhóspita donde es difícil su acceso. Luego de disfrutarla y deleitarnos un buen rato, nos comimos el fiambre el cual fue huevo, chorizo y papa cocida, esta última alusiva al páramo de las papas (ver foto portada) continuamos el recorrido para conocer las lagunas; los patos, la Ortiz, Suramérica, Regina y La Seca. Realizamos el recorrido en tipo circuito caminando por humedales y frailejones hasta salir nuevamente cerca al mirador del Huila o camino nacional.
 

Mirador Laguna de Santiago

Descendimos nuevamente y sin mucho afán, tomando fotos a cada paso. En el sector del alto Caquetá, entramos a la cabaña de PNN para recibir una charla brindada por parte de los guías - Carlos Guerra Guzman y Gustavo Adolfo Papamija. Nos brindaron información muy importante del Parque Nacional Natural Purace y además nos proyectaron un muy buen video del PNN Puracé, el cual fue elaborado por el guía Gustavo Papamija, pueden ver el video en el siguiente link: https://www.youtube.com/watch?v=c7k011SXCLw

Ya entrada la noche nos desplazamos nuevamente a la finca Los Milagros de Analia y Gulberto. Esa noche nos tomamos unos ricos roncito a la luz de una espectacular Luna Llena. El ron fue una alcahuetería del degenerado de Juanpa, quien llevo desde San Agustín el perfecto desinhibido para poder contar muchas historias y lograr des-atrasarnos de chismes de vida, luego de un largo periodo de tiempo sin viajar juntos.

Día 6: Salimos a las 8am de la finca Los Milagros, la caminata inicia recorriendo las fincas de los alrededores de la vereda La Hoyola, se observa en el paisaje de lugar que las actividades agropecuarias principales de la zona son la siembra de papa y la ganadería. Llegamos a un pie de monte donde iniciamos ascenso por bosque tipo alto-andino durante 30min, hasta llegar el mirador Cuciyaco (Cuci: conejo, Yaco: agua) donde se encuentra la laguna del mismo nombre con forma de conejo. Continúa por todo el filo de la montaña y luego de 20 min, se inicia descenso por un hermoso sendero dentro del mismo bosque alto-andino hasta llegar a la finca vara blanca, se sigue en travesía por potreros, pasando la quebrada las piedras y nuevamente llegamos a la casa posada de Analia y Gulberto, la caminata de este 6to día fue de 3h aprox. 

Luego del almuerzo empacamos maletas y nos despedimos de Doña Analia y Don Gulberto, fue un poco nostálgico alejarnos de esta bella pareja de campesinos que nos brindaron el mejor trato y un gran calor humano en su vivienda durante 2 días. Realizamos caminata de 4km por carretera destapada, hasta llegar al corregimiento de Valencia, perteneciente al municipio de San Sebastián del departamento del Cauca. Nos ubicamos en la casa de doña Hemerita, una señora de avanzada edad que vive sola y se sostiene económicamente con el ingreso que dejan los turistas que van a alojarse a su vivienda (muy bajo movimiento), en la noche nos preparó comida en fogón de leña y luego salimos a dar una vuelta a las 4 calles que conforman este corregimiento, es un lugar bastante frío (3200msnm) y muy solo. Nos acostamos temprano, pues el bus saldría a las 5am del otro día para llevarnos hacia la ciudad de Popayán.

Día 7: Salimos a las 5am, el recorrido en el bus-chivero, es increíblemente hermoso, se inicia con un ascenso de aproximadamente 500m por la montaña, en carretera destapada hasta llegar casi a los 4000 msnm. Luego el vehículo toma un largo plan por aproximadamente de 1h:30min, en este tramo se alcanza a disfrutar la majestuosidad y colorido de la alta montaña, se logra observar por la ventana del bus cientos y cientos de frailejones y vegetación paramuna súper hermosa, el frío también es además muy penetrante en este trayecto. En el bus conocí a alguien de la zona (Carlos Majín), quien me contó que en el recorrido se pasa por sitios importantes de la zona llamados barbillas, guachicono, río blanco, rosas y timbio y me contó además que en la región existen 5 resguardos indígenas llamados Río Blanco, Guachicono, San Sebastián, Caquiona y Pancitará, todos pertenecientes a la etnia Yanacona.

Llegamos a Popayán a las 1pm, directo a la terminal para asegurar los tiquetes. Debido a la afluencia de viajeros, fue necesario comprar tiquetes con destino Cali para luego hacer conexión con Medellín. Compramos tiquetes para las 7pm y fuimos a realizar un pequeño recorrido a la ciudad de Popayán (ciudad blanca), recorrimos centros de artesanías, lugares religiosos, un mirador, observamos eventos culturales, bailes etc, por ser época de semana santa los ríos de gente fueron impresionantes durante todo el recorrido. Ya a las 7pm salimos rumbo a Cali y de allí tomamos bus hacia la ciudad de Medellín.

El 11 de abril llegamos a nuestras casitas, recargados de la mejor energía y con el espíritu alegre y renovado de recorrer la alta montaña y además maravillados de haber conocido uno de los lugares más mágicos y de mayor importancia ambiental de nuestra geografía colombiana, como es el páramo de las papas - LA ESTRELLA FLUVIAL COLOMBIANA, ubicada en el Macizo Colombiano.

Aventureros: Juan Pablo Serna, Vicky Trujillo, Diana Ramírez, Diana Vergara
Contacto: Facebook - Gustavo Adolfo Papamija

Rutas en Wikiloc, elaboradas por Vicky Trujillo: 

GUAINÍA - Tierra de muchas aguas



La primera palabra que se me viene a la mente cuento recuerdo este viaje a los cerros de Mavecure, es la de “INMENSIDAD”. Estar en esta región del  departamento del Guainía (Selva Amazónica), me permitió entender las descripciones relacionadas con las distancias, la alimentación y las diferentes formas de movilizarse en la región, descritas en los libros como perdido en el Amazonas, donde hasta ahora me parecían datos ficticios o exageraciones para hacer los libros más emocionantes. Para las comunidades indígenas de la zona es común recorrer un trayecto de 3 días navegando por un río para poder llegar a otra comunidad o cazar manadas de cerdos de monte para alimentarse durante varias semanas o partir un día en busca de alimentos para llegar a los tres días con el resultado de la cacería, son historias que no le caben a uno en la cabeza por el estilo de vida que llevamos, pero definitivamente esta región es de otro mundo y pura conexión con la madre tierra.

Iniciamos el viaje el día 1 de enero de 2014, rumbo hacia la ciudad de Bogotá, un total de 8 aventureros, amanecimos ese primer día en Bogotá y el día 2 de enero realizamos vuelo en aerolínea Satena hacia Puerto Inírida a las 9am, lugar al cual llegamos a las 10:30am, nos ubicamos en el hotel Toninas Tours. Almorzamos y nos dispusimos a realizar caminata a un lugar llamado la laguna de las brujas, por un pequeño bosque y piso en rocas, la caminata hasta la laguna tardo 2h y allí nos quedamos esperando ver atardecer, es un lugar muy tranquilo con formaciones inmensas rocas que generan un especial paisaje al contrastar con el particular color  marrón de las aguas del lugar. Regresamos al hotel, nos bañamos, cenamos y nos fuimos a conocer un poco los alrededores del hotel y el malecón. Puerto Inírida es un pueblo un poco desordenado, con mucho ruido y mucho comercio la verdadera magia, se encuentra al salir del pueblo, en todos sus alrededores, en las comunidades, en la selva, pero sobre todo… en los ríos...

Día 2: Salimos a las 8am para realizar recorrido por los alrededores de Puerto Inírida, visitamos un lugar de venta de artesanías, luego nos bañamos un rato en el río Inírida en un lugar denominado Coco Nuevo, el cual tiene como particularidad formaciones rocosas grandes muy bonitas que sobresalen sobre el río Inírida. Luego del baño continuamos en el colectivo hacia un sector donde pudimos observar la flor de Inírida, la cual toma un color diferente en época de invierno o de verano (amarilla o roja). Continuamos el recorrido hacia el caño Vitina, donde tomamos baño nuevamente en estas particulares aguas color marrón, los ríos como el Inírida y el Guaviare son calientes sin embargo los caños tienden a ser más frescos, ya que al pasar el agua por entre las sombras del monte se enfría bastante.

En la tarde luego de almorzar, nos embarcamos en lancha rumbo hacia el río Atabapo, el cual se llega navegando inicialmente por el río Inírida, luego el Guaviare, hasta llegar al río Orinoco (límites con Venezuela), ingresamos por el río Atabapo  hasta llega a unas hermosas islas de arena suave y blanca, estas islas se forman en épocas de verano ya que los ríos bajan su nivel aproximadamente 5m generando diversas áreas para acampar. El color de las aguas como el resto de los lugares ya visitado son de color marrón, este color se crea en los ríos por la cantidad de material vegetal que llega a ellos provenientes del follaje de los árboles de la selva. En este lugar nos bañamos el resto de la tarde mientras vimos atardecer y los guías nos armaban el campamento, en la noche cenamos y Adriana nos leyó cuentos antes de dormir a la luz de la espectacular luna que nos acompañó durante todo el viaje.

Día 3: Nos levantamos temprano para ver amanecer, es realmente alucinante los amaneceres y los atardeceres que se logran observar en esta región, tanta agua, el llano, los colores particulares de los ríos y los diferentes verdes de la selva le brindan una magia especial a estos momentos que acompañados con los rayos del sol hacen estremecer el alma.

Luego de ver amanecer y extasiados con la magia del lugar, no completo el buen momento nuestro guía Domingo con un suculento “Pescado Moquiado”, traído de un caserío cercano, es pescado tipo Pavón ahumado, el cual sabe realmente espectacular, nos deleitamos con este suculento plato, luego desarmamos campamento y a las 8:30 salimos rumbo al río Orinoco donde desayunamos caldo de pescado en un sector llamado Puerto Nariño, en el regreso entramos a ver las Toninas en el río Atabapo, pero como no fueron muy evidentes (parecían pescados grandes),  continuamos suponiendo que las Toninas eran un mito de la región para atraer turistas jajajaja.

A las 10am, iniciamos viaje hacia el parque los Tuparros en la lancha (la voladora) a una velocidad de 60km/h por todo el río Orinoco y tardamos un total de 3h 30 minutos en llegar a un lugar llamado Mantequero, (en este trayecto paramos en unas formaciones rocosas grandes donde tienen una virgen como protección de los lancheros). En el sector mantequero nos recogió un camión tipo estaca, llamado la burbuja roja, es un carro destartalado de los años de upa!! que milagrosamente rueda, este carro nos transportó durante 1 hora, por toda una sabana, (daba la sensación de estar en un safari) hasta llegar al parque los Tuparros. Nos dejaron en las riberas del río Tuparro con el fin de realizar descenso con chalecos en un trayecto de 20 minutos, durante el descenso en el agua, logramos ver atardecer con unos hermosos arreboles de color naranja-rojizo.

A las 6:30pm nos recogió una lancha para llevarnos a un lugar llamado “sector Raudales de Maypure”, donde amaneceríamos los dos siguientes días. Descargamos equipaje y mientras nos preparaban la cena (espaguetis) y nuestros guías armaban el campamento, nos quedamos compartiendo un rato con algunos turistas de Bogotá, Cali e Ibagué, cenamos y nos fuimos para la playa a disfruta de la espectacular luna llena y finalmente a dormir a las 10:30pm.

Día 4: Desayunamos y a las 8:30am salimos a realizar caminata a los cerros de Maypure, recorriendo monte y grandes rocas… se realizó un ascenso de aprox. 200m hasta llegar a un bello mirador donde logramos observar las grandes extensiones de selva que van hasta más muuuucho allá de donde alcanzan a ver los ojos y los raudales de Maypure, donde se logra ver la gran fuerza del agua en grandes rápidos que son innavegables.

Regresamos a la zona de camping y como primicia los chicos del lugar nos informaron que un jaguar había cazado una de las gallinas del caserío. Con mucha curiosidad y con un poco de susto nos dispusimos en absoluto silencio a adentrarnos en el relicto de bosque ya que se escuchaban ñarrear y moverse a menos de 20m, se trataba de una familia, un jaguar grande y dos pequeños, esto lo logramos saber porque en la noche habían dejado las huellas al lado del camping. A pesar de haber dedicado un largo rato  para intentar verlos, no fue posible, ya que estos felinos son muy esquivos y tienen muy buen olfato… queda la gran emoción de haber sentido en estado salvaje al más grande felino de Colombia.

Se realizó recorrido a unas formaciones rocosas denominadas “el cementerio” y luego de esto almorzamos. Luego del almuerzo partimos en lancha hacia lo que había sido un instituto de rehabilitación llamado “La Tambora” pasando por los raudales de Guajibo. Fue muy curiosos escuchar las historias de este instituto, ya que las personas intentaban continuamente fugarse pero estaban rodeados de pura selva y del río Orinoco, lo que generaba un encierro natural que impedía que los internos se escaparan. El sacerdote creador de este instituto falleció y luego de esto nadie continúo con su bella labor, por lo que este instituto es un lugar abandonado en medio del río y la selva, donde a cada segundo acumula polvo, humedad y crece hierba por entre cada ladrillo.

Luego de realizar un largo recorrido en el abandonado instituto de “La Tambora”, nos fuimos con el fin de ver atardecer en el río Tomo (aguas tibias y de color marrón) en unas playas inmensas donde logramos ver de forma más clara las Toninas, tomamos baño y observamos caravanas que cuidaban con gran re-celo sus nidos. Ya entrada la noche partimos hacia el lugar del camping que es realmente denominado por los lugareños como “Condado Fernández”, de regreso pasamos nuevamente por los raudales de Guajibo que tienen una fuerte corriente y decía el lanchero que eran muy riesgosos, afortunadamente todo salió muy bien en nuestro regreso.

Día 5: Partimos del lugar de camping denominado “Condado Fernández” que le pertenece a Venezuela a las 8am, para realizar caminata hacia el sector Mantequero donde nos recogería la lancha. El recorrido caminando se realiza por una inmensa Sabana, con pequeños relictos de bosque, hermosos árboles gigantes palmas y grandes formaciones rocosas. Al llegar a Mantequero luego de 2 horas de caminata nos tocó esperar aprox. otras 2h debido a que la lancha se había retrasado con el otro grupo de turistas. Mientras tanto nos bañamos en el río Orinoco… la lancha nos recogió a las 12m y en cuestión de 1 hora llegamos a Puerto Nariño donde almorzamos. Continuamos navegando por el río Guaviare nuevamente hasta Puerto Inírida, donde pasaríamos las dos siguientes noches en el hotel Toninas Tours.

Día 6: Salimos del hotel a las 8am hacia un lugar llamado “Los Pozos”, donde existe un criadero de peces ornamentales. De allí realizamos caminata de 1h hacia la comunidad indígena de Guamal donde habita la etnia Kuripaca, posteriormente realizamos recorrido hacia la comunidad de Sabanitas punto en el cual almorzamos, pero antes del almuerzo nos deleitamos comiendo de todo tipo de frutos de la zona; guayaba arazá, copo azul, guama, uva caimarona y piña. El almuerzo fue llevado hasta allí desde Puerto Inírida por los guías y fue arroz con carne y verduras. Luego del almuerzo continuamos caminando hacia la comunidad de Morichalito donde tomamos baño nuevamente en caño Vitina, luego del baño caminamos un poco al sector de Coco Nuevo (desembocadura del río Inírida sobre el río Guaviare) donde en unas hermosas rocas gigantes esperamos a ver atardecer. (nota: durante el día tuvimos la grata compañía de 3 perritos que desaparecieron al terminar el recorrido).

“El río Guaviare toma su nombre debido a que se forma de la desembocadura del río Guayabero y del río Ariare”.

Día 7: Madrugamos a las 5am para avistar Guacamayas con la compañía de un fotógrafo llamado Ernesto Obando de la ciudad de Ibagué y aunque no se lograron observar muy de cerca las Guacamayas, por lo menos tuvimos la fortuna de escucharlas y verlas volar sobre nosotros en grandes bandadas. Regresamos al hotel y a las 8am salimos rumbo a los cerros de Mavecure 15 minutos después de salir de Puerto Inírida, los lancheros realizaron una parada en la desembocadura de un río calmado y tranquilo con el fin de avistar Toninas (delfines) y afortunadamente tuvimos el inmenso placer de verlas en todo su esplendor, parecían danzarle a la lancha, brincaron por todos los lados de la lancha y por fin nos dimos cuenta que no era un mito de la región jajajajaaja!!.

Dos horas después de navegar por el río Inírida llegamos a los cerros de Mavecure, los cuales se encuentra ubicado geográficamente en los  límites con Venezuela y Brasil. Los Cerros de Mavecure son los restos de las montañas más antiguas de América Latina, son rocas gigantes que se levantan en la selva.

Son tres inmensas rocas, la más pequeña se llama Mavecure (250m), donde antiguamente los indígenas obtenían el Mave, planta con la cual elaboraban una flauta para comunicarse entre ellos durante la actividad de la caza y el Curare que era un veneno blanco obtenido de esta roca para cazar los animales. Están también los cerros Pajarito el cual toma su nombre debido a que allí tenía el nido un águila que sobrevolaba todo el tiempo la roca y no permitía que ninguna embarcación pasara por ese lado del río y el cerro Mono que es el más alto con 660m, en el cual se dice existían diversas familias de monos. Dicen los indígenas de la región que en estas formaciones rocosas se encuentran la sabiduría  de los pueblos Puinaves.

En este lugar de los cerros de Mavecure es necesario bajarse de la lancha, debido a que existe un pequeño raudal y recomiendan los lugareños que los turistas no deben pasar montados en la lancha. Después del raudal nos embarcarnos nuevamente rumbo hacia la comunidad de Remanso lugar al cual llegamos luego de navegar 2h por el río Inírida, allí acamparíamos, no sin antes solicitar el permiso al capitán de la comunidad para poder realizar el camping. En la tarde salimos a realizar una caminata de 2h hacia los raudales de Chorrobocón, en el sector existe una comunidad indígena con el mismo nombre pero no alcanzamos a ir por cuestiones de tiempo ya que nos cogía la noche y no llevábamos linternas. Ese día tuvimos fuertes lluvias tanto en la caminata como en la noche mientras cenábamos.

Día 8: Nos levantamos a las 5:30am para ver amanecer, antes de salir comimos cereales con piña y emprendimos viaje en lancha rumbo a los cerros de Mavecure a las 7am. Llegamos a los cerros específicamente a la comunidad del Venado, el cual es un caserío grande, donde nos tenían listo el desayuno de caldo de pescado Pavón. Luego de desayunar salimos a realizar caminata al cerro Mavecure que es el cerro más bajito, pero el único con posibilidad de realizar ascenso. La caminata inicio a las 10am y tardo 1h y 30 minutos por puras rocas, este recorrido se debe realizar con mucha prudencia debido a que existe el riesgo constante de rodar por estas rocas que tienen altas pendientes, si por algún motivo llueve antes o durante el recorrido, se recomienda no seguir ascendiendo ya que la roca se pone extremadamente lisa y muy peligrosa. Llegamos a la cima del cerro y tomamos las más hermosas fotografías del viaje, allí los imponentes cerros Pajarito y cerro Mono se presentan ante nuestros ojos como las más hermosas formaciones rocosas de la zona, es deslumbrante que en esa inmensidad del llano sobresalgan estas rocas hasta tanta altura y de una forma tan majestuosa. Nos tomamos el tiempo suficiente para disfrutar y deleitarnos con el lugar y nuevamente realizamos descenso hacia la zona de camping en la comunidad del Venado, donde nos tenían almuerzo listo que fue sancocho de gallina, patacón y jugo de manaca.

Después del almuerzo nos fuimos a tomar un refrescante baño en el caño San Juan, donde  luchamos todo el tiempo con lo tabanos que no nos dejaban en paz, jugamos un rato en la arena y luego de ver atardecer regresamos en la lacha a nuestro camping. En la noche hicimos un asado como celebración del cumpleaños de Diana Ramírez, se tenía además para la celebración una nevera llena de frutas, torta y los ingredientes para preparar un delicioso hervido. Aunque nos llovió fuerte hicimos la forma y nos las arreglamos para poder disfrutar de la noche y continuar con la celebración ya que teníamos preparado un show de “strep tease” con nuestros guías para el cumpleaños de Diana jajajaja.

Día 9: Salimos en medio de un aguacero en la lancha “La Voladora” navegando el río Inírida a las 7am hacia Puerto Inírida, 2h después llegamos a Puerto Inírida no sin antes parar a despedirnos de las Toninas. Llegamos al puerto a las 10am, nos organizamos salimos a comprar artesanías y nos dirigimos para el a aeropuerto a las 12m ya que el vuelo rumbo a Bogotá estaba programado para salir a la 1:30pm. Llegamos a Bogotá a las 3:00pm y en el aeropuerto Jhon Sánchez invitó al grupo a almorzar en el restaurante Creps & Wafles, con el fin de celebrar el cumpleaños del Diana Ramírez y de despedir el viaje. Fue un almuerzo exquisito con el cual le pusimos el sello final al viaje por el departamento del Guainía – Tierra de Muchas Aguas.

El departamento del Guainía es un lugar digno de visitar no solo por los majestuosos cerros de Mavecure, sino que además recorriendo este lugar se puede disfrutar al navegar a través de diferentes ríos como el Inírida, Guaviare, Atabapo y Orinoco, se puede también acampar en playas de suave arena blanca que se forman en las riberas de los ríos, visitar comunidades indígenas, realizar actividades de pesca, entre otros.

Datos de la zona: La temperatura oscila entre los 27 y 28 grados centígrados – los principales cultivos son la piña, el plátano, la caña y la chirimoya – Los peces más consumidos son el bagre, el bocachico, el pavón y la payara – Las comidas típicas son el pescado Ajicero (pescado cocinado en ají y sal, el pescado Moquiado (ahumado) y el pescado molido. – Las bebidas típicas son la preparada y el jugo de manaca.

Costos: Galón de gasolina en Venezuela ($23.000) -  en frontera con Orinoco ($200.000) - en puerto Inírida ($540.000) - arriba de Mavecure ($1.200.000). Costo estudiante en el interior del país ($820.000) - Costo estudiante en el sector de Puerto Inírida ($2.600.000).

Comunidades indígenas de la región: Almidón (etnia Tucana), Caranacoa (etnia Curripaca), Ceiba (etnia Tucana y Curripaca), Paloma (etnia Puinave), Huesitos, Remanso (etnia Puinave), Venado (etnia Puinave), Piedra alta (etnia Puinave), Cejalito (etnia Puinave), Samuro (etnia Curripaca), Chorrobocon (etnia Puinave)

Aventureros: John Jairo Sánchez, Liliana María López, Diana Cristina Ramírez, Alexandra Ramírez, Erwin Andrés Ramírez, Helena Restrepo, Elsa Adriana Restrepo y Diana María Vergara.

Contactos: Hotel Toninas Tours tel: 565 60 27 – 310 563 48 87 – 310 303 51 30 – toninastours@hotmail.com – Guía Domingo de la etnia Puinave cel: 314 445 96 25